¿Cómo hago para organizar mis finanzas personales? Si estás pensando en un mejor futuro para vos y tu familia seguramente te hiciste esta pregunta. Con solo incorporar algunos hábitos vas a poder hacer una gran diferencia y en poco tiempo vas a empezar a ver resultados.
Si sos empleado, al empezar el mes te depositan el sueldo, lo que puede ser una ayuda para llevar cierto orden. Si trabajás por cuenta propia el tema es un poco más complicado ya que tus ingresos dependen de la fecha que pactaste con cada cliente, de que no haya ninguna demora en los pagos y varias cosas más. Cualquiera sea tu caso te presentamos algunos tips prácticos para ayudarte.
#1 – Ser organizado
Esto suena bien y parece simple pero en la práctica puede complicarse un poco, algunas cosas que pueden impedirte ser organizado son:
- Trabajás muchas horas: te gana el cansancio y no tenés tiempo ni ganas de ponerte a pensar en lo que ganaste ni en lo que estás gastando.
- Va contra tu naturaleza: así como hay personas que son muy ordenadas, existen las que se sienten más cómodas viviendo con cierto nivel de desorden.
- No sabés por dónde empezar: tenés claros tus objetivos pero no ponés primera porque no estás seguro de cuál es el primer paso a dar.
¡Buenas noticias! Para todo esto hay soluciones. Si estás muy cansando, te aseguro que dedicar unos minutos a la semana te alcanzarán para ordenarte, no lo tomes como una carga sino como una inversión para tener un mejor futuro. Además, mientras ordenás tus cuentas podés hacerte unos buenos mates.
Hacer una planilla con tus ingresos y gastos mensuales te va a aclarar el panorama.
En caso de que la organización no sea lo tuyo siempre hay alguien que te puede dar una mano: tu familia está para ayudarte, podés pedirle a alguien de tu confianza que te lleve la cuenta de tus ingresos y gastos. ¿No sabés cómo empezar? El próximo punto es para vos.
#2 – Poner prioridades
Lo primero que tenés que conocer son los ingresos que vas a tener en los próximos meses, si no estás seguro, una buena aproximación será más que útil.
Por otro lado, hay que anotar los gastos habituales, algunos pueden ser: alquileres, servicios (agua, cable, etc.), comestibles, suscripciones, impuestos.
¿Dónde anotarlo? Realmente no importa, tanto un cuaderno como un archivo en tu computadora o celular tienen la misma utilidad. Una vez que hayas hecho esto ya vas a tener un panorama claro para poder actuar.
¿Estás conforme con tus ingresos? ¿Creés que todos tus gastos son necesarios? Es momento de poner las manos sobre el volante de tus finanzas y empezar a llevarlas hacia donde quieras.
Lo más sencillo en esta etapa es analizar los gastos y lugares que frecuentás: muchas veces hacer pequeñas compras es mucho más costoso que hacer una compra grande. Hoy en día hay muchos supermercados que tienen descuentos y promociones, son una buena opción para empezar a ahorrar.
¿Necesitás hacer alguna compra para tu hogar que representa una suma importante de dinero? Visitar por lo menos tres negocios distintos te va a dar alternativas, aunque las compras por internet suelen tener un costo mucho menor y con la posibilidad de pagar en cuotas sin interés.
#3 – Tener metas claras
Ya sabés dónde estás parado, ahora solo tenés que elegir hacia dónde querés ir.
Nos acostumbraron a pensar en el corto plazo y eso no está bueno. Es como caminar pensando en llegar a la esquina y una vez que estamos ahí decidir hacia dónde ir, caminar otra cuadra y ponerse a pensar qué dirección será la correcta… ¿No te parece una pérdida de tiempo? Lo mismo pasa con las finanzas: está bien pagar las cuentas a fin de mes pero también hay que mirar al horizonte, decidir qué querés hacer de acá a unos meses o incluso años.
¿Querés ahorrar para comprar tu casa? ¿Estás pensando en hacer un viaje familiar? ¿Tu objetivo es tener ese auto que tanto te gusta? ¿Invertir en tu negocio? Solo tenés que averiguar cuánto dinero necesitás para hacerlo realidad y destinarle una parte de tus ingresos todos los meses.
Warren Buffet, uno de los hombres que mejor supo manejar sus finanzas, nos recomienda: “No ahorres lo que te sobra después de gastar, gasta lo que te sobra después de ahorrar”. El mensaje es claro, no esperes más para ahorrar, basta de excusas.
¿Cuánto tenés que ahorrar? Lo que puedas y quieras, un 5% de tus ingresos o un 30%, cualquiera sea el número va a superar por mucho al cero.
¿Cómo hacés para organizar tus cuentas mes a mes? ¿Tenés alguien que te de una mano o preferís encargarte personalmente de todo esto?
Muy útiles los consejos! Es importante organizarse, poner prioridades y establecer metas para el futuro.
¡Gracias Vicky, me alegro que te sirvan! 🙂
“Los que no saben guardar, son pobres aunque trabajen. Nunca por más que se atajen se librarán del cimbrón, al que nace barrigón, es al ñudo que lo fajen.”
Excelente tu blog. Tenés buena mano para hacernos llegar ideas muy útiles. Abrazo grande.
¡Gran aporte, mil gracias Lobo! Te invito a suscribirte así seguimos en contacto por acá, ¡abrazo!
Groso! Excelente post!
Muchas gracias Nico, ¡abrazo!